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PARQUE NATURAL DE LA ALBUFERA

  A tan sólo 10 km. de la ciudad de Valencia, el Parque Natural de la Albufera nos transporta a un mundo de naturaleza en estado puro donde los únicos sonidos que se escuchan son los cantos de los pájaros y el sonido del agua. 
  Este parque tiene una extensión de casi 24 kilómetros cuadrados, y comprende varios municipios de la zona de L´horta y de La Ribera, constituyendo uno de los humedales costeros más representativos y valiosos de España, hasta el punto de que en 1986 fue declarado Parque Natural. 

  Albufera significa, según su origen árabe "al-buhayra", marecito o pequeño mar. Y no es para menos, ya que La Albufera de Valencia es el mayor lago de España, ocupando 21.000 hectáreas. Sus ricas aguas han servido tradicionalmente de sustento a pescadores y cultivadores de arroz, dando origen a una suculenta gastronomía típica de esta zona.



  Con una profundidad media en toda su superficie de apenas un metro, y un lecho compuesto de finos limos con elevado contenido en materia orgánica, este lago se encuentra separado del mar por una estrecha franja de tierra con dunas y bosques de pinos, conocida como la Dehesa o Devesa. Sus aguas claras y el perfecto estado de su arena ha hecho merecedora a este tramo de costa del galardón europeo de la Bandera Azul. 

HISTORIA

  La formación de la Albufera tuvo lugar hace 1,8 millones de años como resultado del cierre del golfo o bahía de la costa valenciana por un cordón litoral. La separación definitiva entre la Albufera y el mar se produjo durante la época romana, en la cual se estima que el lago ocupaba una extensión de 30.000 hectáreas. La reducción de la Albufera ha sido constante, y a medida que el lago se reducía, lo hacía también la fauna que albergaba. 

  Al principio eran los habitantes del entonces poblado de Ruzafa, los que iban cada día a pescar a la Albufera, pero fue el rey Jaime I el que en 1250 concedió el derecho a la pesca a los habitantes de la isla del Palmar y de los pueblos de Silla y Catarroja.

  En el año 1865, el lago pasó a ser propiedad del Estado, dando por finalizados más de seis siglos de propiedad real, en los que la Albufera había pasado de mano en mano. Más tarde, ya comenzado el siglo XX, la laguna pasó a ser propiedad de Valencia.

  Durante todo este tiempo se han ido ganando terrenos al lago, para ser cubiertos por arrozales en los que se cultiva el arroz bomba, una variedad típica de este lugar y el ingrediente principal de la paella valenciana. La extensión actual de los cultivos de arroz rondan los 200 kilómetros cuadrados, sin duda unas dimensiones que superan los límites del Parque de La Albufera.
FLORA Y FAUNA

  El Parque Natural de La Albufera presenta una gran variación de hábitats que permiten la existencia de una diversa flora y fauna. Una primera diferenciación distinguiría cuatro grandes ambientes en el contexto del Parque: La restinga o barrera litoral; el marjal o zona que rodea el lago y que contiene los arrozales y la huerta; el lago y las zonas de monte; estos ambientes se pueden estructurar, a su vez, en distintos subambientes de características más homogéneas, tanto en lo relativo a su génesis como a su función ecológica en el conjunto del sistema.

  La mayor parte de la superficie del Parque Natural de La Albufera se halla ocupada por cultivos de arroz y por el propio lago; por ello, la vegetación autóctona queda restringida, por una parte, a las acequias, ullals y a las zonas marginales del arrozal y el lago y por otra parte, a la franja costera arenosa, especialmente en la Devesa.

  El parque tiene en su componente zoológica uno de los aspectos más valiosos. A la abundancia y diversidad de especies, tanto de vertebrados como de invertebrados, hay que añadir su importancia por los endemismos que presenta. 

  Sin embargo, la contaminación de las aguas del lago y acequias ha provocado que estas especies se hallen en franca recesión, refugiándose en ullals y algunos tramos de acequias que todavía conservan una óptima calidad de sus aguas. Las comunidades piscícolas son las que más intensamente han sufrido los efectos de la contaminación del agua y de otros factores como la sobreexplotación o la introducción de especies alóctonas, provocando que especies de peces como el fartet o el samaruc, se encuentren en peligro de extinción.

  Este parque es conocido por la riqueza de especies de aves, entre las que destacan el pato colorado o "sivert", la cuchara común, la garza real, el charrán común, el charrán patinegro, la cigüeña común y la gaviota.

  Los mamíferos también han sufrido una drástica reducción en su diversidad a causa de la distorsión producida en las condiciones del medio. Se ha registrado un notable incremento de las especies cosmopolitas y triviales como las ratas y ratones, debido en gran medida a la gran presencia humana en zonas del parque como la Devesa. Este mismo motivo es el que provoca que en cambio, no aparezcan especies como la jineta, el lirón o la liebre.

  Entre la flora, se distinguen: las dunas litorales (campanilla de mar, grama de duna, aladierno, lentisco), los saladares, el bosque mediterráneo (pino carrasco, lentisco, enebro, coscoja, mirto, tomillo, aliaga, romero, palmito) y las zonas de cañas.
  Los chopos y sauces son los encargados de fijar mejor la tierra entre los campos de arroz para que no pierda consistencia. También el carrizo, la caña y la enea, o el lirio amarillo o de marjal están presentes en primavera.

  En el interior del lago de La Albufera encontramos seis islotes, llamados matas, que albergan densa vegetación. Estos islotes se denominan Mata del Fang, Mateta de Baix, Mata de la Barra, Mata de l’Antina, Mata de San Roc y Mata del Rey.

RECORRIDOS POR EL PARQUE

  El Parque de La Albufera guarda la flora y fauna autóctona valenciana, estando adaptado con senderos, guías y paneles de información para no perderse admirando todas las especies y paisajes que brinda.

  Hablar de la Albufera de Valencia es hablar de la isla del Palmar. En la actualidad El Palmar es una pequeña pedanía de la ciudad de Valencia, y con una población censada de unos 400 habitantes es el enclave turístico por excelencia para conocer la Albufera. En este lugar podemos degustar los más típicos platos valencianos como la paella, el allipebre o la llisa a la sal. Tras la comida, nada mejor que un tranquilo paseo en barca por la Albufera, mientras navegas entre las grandes matas de cañas admirando la fauna del lugar, y contemplando las tonalidades rojizas y doradas de la puesta de sol sobre las aguas.

  Estas excursiones en barca tradicional pueden incluir la visita de una barraca tradicional valenciana de las que aún se conservan en La Albufera.

  Uno de los recorridos que nos lleva por el interior del parque es el de Na Molins. Se trata de una ruta verde para realizar en bicicleta durante 25 kilómetros en los que aprovechar lo más característico de La Albufera. Toda ella está marcada y comienza en el pueblo de El Palmar para terminar de vuelta en este mismo lugar.

  Podremos ver los campos de arroz, acequias, casa de aperos, y masías, por no hablar de la gran fauna de aves que por allí habitan. La magia del recorrido habita en un ecosistema dominado por el agua que recorre todos los campos y que te acompañará al ritmo de tu bicicleta.

  A lo largo del recorrido pasaremos por el marjal, una zona inundada la mayor parte del año y ocupada por campos de arroz, llegando hasta la Muntanyeta dels Sants, lugar con una gran vista panorámica. Allí parada obligatoria para visitar la Ermita dels Benisants de la Pedra, San Abdón y Senén. 
  El principal lugar en el cual realizar recorridos a pie por el parque se encuentra en La Dehesa del Saler, franja arenosa de anchura mayor a un kilómetro y más de seis de longitud, que separa el lago del mar Mediterráneo. 


  En la Dehesa se han señalizado seis itinerarios que, en su conjunto suponen 8,4 km. de recorrido. Cada uno de ellos identificado por un color y con una temática distinta, para que el visitante pueda elegir aquél que le resulte más interesante:
  • Itinerario lúdico de la playa: El itinerario discurre por el paseo marítimo “Francisco Lozano” que atraviesa de manera longitudinal el ecosistema del primer cordón dunar de la playa de El Saler. (2000 metros - 45 minutos).
  • Itinerario histórico de El Saler: El itinerario discurre por el Tallafoc de El Saler desde el pueblo hasta el Muntanyar de la Mona. (600 metros - 30 minutos).
  • Itinerario paisajístico: El itinerario discurre por el Camí Vell de la Devesa, que unía la ciudad de Valencia con el Perellonet. Durante el recorrido se observan las principales malladas de la zona norte: la del Quarter, la de El Saler, la de la Rambla, la Redona y la Llarga. (4000 metros - 1hr. 45m.).
  • Itinerario de los sentidos: El itinerario parte del Camí Vell entrando por el Tallafoc de la Rambla, hacia el sur, y se adentra hacia el matorral y el interior de las dunas fijas. Con este itinerario descubrirás la naturaleza utilizando los cinco sentidos. (300 metros - 20 minutos).
  • Itinerario histórico de El Pujol: El itinerario discurre paralelo a la Gola de El Pujol desde el Camí Vell de la Devesa, a la altura del lago artificial, hasta las compuertas que comunican el lago de l’Albufera con el mar Mediterráneo. (700 metros - 40 minutos).
  • Itinerario botánico: El itinerario discurre por la zona llamada Pla de la Sanxa, situada al sur de la Gola de El Pujol. Se adentra en el sistema dunar interno o de dunas fijas colonizado por una densa vegetación de matorral y pinar. (800 metros - 25 minutos)
A lo largo de estos seis recorridos se han distribuido un total de 11 paneles informativos con el siguiente contenido: descripción del Parque Natural de l’Albufera, plano general de los itinerarios, fotografía aérea en la que se aprecia el recorrido y unas recomendaciones de conservación y protección del entorno.

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