Estratégicamente situada en el centro geográfico de la Península Ibérica, Madrid conserva uno de los cascos históricos más importantes entre las grandes ciudades europeas, que se funde armónicamente con las más modernas y cómodas infraestructuras, una completa oferta de alojamientos y servicios y la más avanzada tecnología en medios audiovisuales y de comunicación. Pero sobre todo quienes visitan Madrid aprecian el espíritu muy acogedor de la ciudad, siempre con un gran ambiente tanto cultural, como de ocio y gastronómico.
El arte y la cultura ocupan un lugar destacado en la agenda de Madrid. La capital cuenta con más de 60 museos que abarcan todo el conocimiento humano, con un especial protagonismo de los que forman el conocido como Triángulo del Arte, con el Prado, una de las más importantes pinacotecas del mundo; Thyssen-Bornemisza, con más de 800 cuadros que abarcan desde los primitivos flamencos hasta los movimientos vanguardistas; y Reina Sofía, dedicado al arte español contemporáneo, con obras de Picasso, Joan Miró, Salvador Dalí y Juan Gris, entre otros.
Más allá de los monumentos y museos que se pueden visitar en Madrid, el encanto que se vive en sus principales plazas y calles, con lugares emblemáticos como la plaza Mayor o la renacida Gran Vía, principales puntos de ocio en el centro de la ciudad, se constituyen como alguno de sus principales atractivos.
Cerca de la Plaza Mayor se encuentra el llamado "centro aristocrático" donde deslumbra el Palacio Real, monumental construcción del siglo XVII, mezcla de barroco y clasicismo. Junto a él, la Plaza de Oriente, el Teatro de la Ópera y la moderna Catedral de la Almudena, consagrada en 1993 por el Papa Juan Pablo II. La Puerta del Sol rodeada de una variada y selecta zona comercial y el "Paseo del Arte", bautizado así por sus incomparables museos, palacios y jardines, completan este conjunto monumental donde brillan con luz propia el edificio del Banco de España, el Palacio de las Telecomunicaciones y las fuentes de la Cibeles y Neptuno.
Extensos y cuidados parques y jardines como el Parque del Retiro, antiguo lugar de esparcimiento de los reyes españoles, la Casa de Campo, el Parque Juan Carlos I, permiten disfrutar del sol, pasear, remar en sus estanques o dar de comer a las ardillas, en una de las capitales más verdes de Europa.
Y cuando caiga el sol, prepárate descubrir la noche madrileña que rebosa de bares, terrazas, restaurantes y discotecas… es un buen momento para descubrir la patria del tapeo en remodelados mercados de barrio como el castizo San Miguel o San Antón. Caminando por la Gran Vía iluminada sentirás esa vibrante energía que contagian las grandes capitales como Madrid y que invitan a volver una y otra vez.
LOS BARRIOS DE MADRID
Madrid tiene tantas caras y personalidades como barrios. Caminar por ellos sin rumbo fijo, es la mejor forma de entenderlas, porque si por algo se caracteriza esta ciudad, es por su imprevisibilidad. No hay nadie que tenga una opinión exactamente igual de esta ciudad, porque Madrid no es una fórmula matemática, es, por encima de todo, el reflejo de la gente y los negocios de sus barrios, los artistas que los vieron crecer y los edificios históricos que los pueblan.
Chueca es el barrio gay de la capital, y también uno de los más animados, especialmente la Plaza de Chueca, el centro neurálgico del barrio y donde conviven bares y restaurantes de toda la vida.
Otro de sus distritos más importantes y especiales es el de Salamanca, de estilo decimonónico y que destaca por la belleza de sus fachadas. Se trata de una de las zonas más elegantes, con firmas de lujo y boutiques exclusivas. Pasea por sus calles y déjate llevar por el encanto de su calidad arquitectónica.
La Latina, al igual que Lavapiés se constituyen como los barrios más céntricos, multiculturales, y con más ritmo de la ciudad. Aquí se encuentra la Puerta de Toledo o la Real Basílica de San Francisco el Grande.
EL RASTRO DE MADRID
Durante nuestra visita a Madrid no nos podemos marchar sin dedicar una mañana de domingo a visitar el Rastro, un mercadillo con más de 400 años de historia en el que se pueden encontrar tanto objetos cotidianos como curiosos artilugios antiguos, todo ello envuelto en un ambiente de lo más animado.
El mercado se sitúa en torno a la Ribera de Curtidores, una cuesta pronunciada a lo largo de la cual se extienden cientos de puestos con los objetos más variopintos a la venta: pela-patatas, muebles, películas, ropa usada o enchufes.
La zona de Madrid que ocupa El Rastro era el antiguo lugar donde se encontraban las curtidurías, muy próximas al matadero. La denominación del mercadillo proviene del hecho de que durante el traslado de las reses hasta las curtidurías se dejaba un rastro de sangre que fue el que dio origen al nombre del famoso mercadillo del Rastro.
Algunas de las calles aledañas a la Ribera de Curtidores se dedican a la venta de algunos productos especializados. Estas son algunas de las calles más interesantes donde podréis hacer algunas compras:
- Calle Fray Ceferino González: conocida como la calle de los pájaros, antiguamente se dedicaba a la venta ambulante de animales. Hoy solo quedan algunas tiendas especializadas.
- Calle de San Cayetano: también conocida como la calle de los pintores, acoge diferentes locales en los que se pueden comprar algunos cuadros, además de los materiales para pintar.
- Calle de Rodas, Plaza del General Vara del Rey y Plaza de Campillo del Mundo Nuevo: zonas especializadas en la compra-venta de revistas, cromos y juegos de cartas.
- Calle del Carnero y Calle de Carlos Arniches: calles especializadas en la venta de libros antiguos.
El horario del Rastro es de 9:00 a 15:00 horas aproximadamente todos los domingos. Se recomienda al final de nuestro recorrido terminar tomando unas tapas en los bares de la zona, y probar uno de los platos típicos de Madrid, los caracoles.
GASTRONOMIA
Se podría decir que Madrid es el escaparate de la cocina española, y en sus tapas está representada casi toda la gastronomía española.
Excelentes mariscos, jamón y embutidos de ibérico, encurtidos variados, preparaciones autóctonas como las gambas con "gabardina", los callos o los caracoles, ahumados, quesos excelentes, pinchos y cazuelas y todas las clases de vino de la variada geografía hacen a Madrid capital de las tapas.
También destaca por su alto consumo de pescado. De hecho es frecuente escuchar que el pescado más fresco de España esté en Madrid, una ciudad de interior que si bien debido a la alta demanda, hace que rápidamente sea trasladado hasta la capital. Un plato muy conocido por todos los habitantes son los calamares. En la Plaza Mayor encontraréis decenas de bares en los que la oferta estrella son los bocadillos de calamares.
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| Tapeo típico, tortilla de patata y calamares |
Y de postre, pues también podremos elegir entre numerosos y variados dulces: las pastas del consejo (conocidas también como Pastas del Senado), son unas pequeñas pastas de limón elaboradas por primera vez para Alfonso XII. Las Rosquillas de Santa Clara con sabor a anís recubiertas con un glaseado de azúcar. Los Bartolillos, o dulces fritos rellenos de crema pastelera y el famoso Barquillo, hoja delgada de pasta de harina y azúcar.
Si algo es característico de Madrid, eso son las porras, consumidas principalmente en los desayunos de la capital. Con una base muy similar a la de los churros, poseen una forma final distinta que les confiere esta exclusividad.
Si algo es característico de Madrid, eso son las porras, consumidas principalmente en los desayunos de la capital. Con una base muy similar a la de los churros, poseen una forma final distinta que les confiere esta exclusividad.
En prácticamente cualquier zona de la capital encontraréis una variada oferta de hostelería para todos los gustos. Para que os hagáis una idea general, estas son las zonas más famosas donde comer en Madrid:
- La Latina: es la zona más castiza de Madrid, donde encontraréis desde bares de toda la vida hasta restaurantes novedosos. La zona más famosa para comer en La Latina es la Cava Baja, que ofrece los platos más típicos de Madrid a un precio muy económico.
- Chueca: la variedad es la seña de identidad de los restaurantes de este barrio. En Chueca encontraréis cocinas de todo el mundo, restaurantes veganos, etc. ¡Es la mejor zona para los paladares curiosos!
- Malasaña: la zona más extravagante y original de todo Madrid es el barrio de Malasaña. La decoración y temática de sus bares y restaurantes roza excéntrico y no deja indiferente a nadie.
- Chamberí: si buscáis bares en Madrid y terrazas donde tomar algo, Chamberí es la mejor zona. La calle Ponzano goza de buen ambiente durante prácticamente todo el día.
- Lavapiés: este barrio de Madrid es sinónimo de cocina internacional: asiáticos, senegaleses, indios, mexicanos… ¡Hay de todo! Es bastante común que los camareros del restaurante esperen a la puerta del local en busca de comensales.
RECORRIENDO LA CIUDAD
01. Puerta del Sol
Comenzamos nuestra visita a la capital partiendo desde el punto cero de esta ciudad, la Puerta del Sol. Su historia se divide en varias etapas. Comenzó con la construcción de la Casa de Correos a mediados del siglo XVIII, el edificio más antiguo de la plaza y que hoy alberga la sede de la Presidencia de la Comunidad de Madrid.
Un siglo más tarde, entre 1857 y 1862, la Puerta del Sol tomó su forma definitiva gracias a los arquitectos Lucio del Valle, Juan Rivera y José Morer, que diseñaron el resto de edificios que conforman esta histórica plaza. Ya en el siglo XX, se añadieron los jardines, la fuente y se incrementó la zona peatonal.
La Puerta del Sol también ha vivido algunos acontecimientos claves en la historia de Madrid, entre los que destaca la proclamación de la Segunda República en 1931.
En la Puerta del Sol encontraréis tres lugares muy conocidos a nivel nacional:
- Estatua del Oso y el Madroño: en la entrada de la calle Alcalá encontramos la estatua símbolo de Madrid. Construida en 1967, es uno de los puntos de encuentro más populares de la capital y representa al oso y el madroño. Cuenta la leyenda que se eligió un oso como emblema de la ciudad en homenaje a un oso pardo que el rey Alfonso XI cazó en uno de los montes cercanos a la capital. El origen del madroño parece más bien provenir de una disputa ocurrida en el s.XIII por el dominio de unos terrenos poblados de este árbol típico del lugar. La actitud del oso comiendo las hojas se cree que pudiera ser porque se creía que estas hojas eran un buen remedio en el tratamiento de la peste.
- El Reloj de la Casa de Correos: conocido en toda España por ser el lugar desde donde se emiten las famosas campanadas de la Puerta del Sol cada fin de año desde 1962. En la Puerta del Sol se congregan cada año miles de personas para comer las uvas y celebrar el nuevo año.
- Kilómetro Cero: es el punto donde comienzan las carreteras radiales españolas. El Kilómetro Cero de la Puerta del Sol está señalizado y los turistas no abandonan Madrid sin su foto sobre él.
También son parte de las estampas típicas de esta plaza la estatua de Mariblanca, la famosa publicidad de Tío Pepe o la estatua ecuestre de Carlos III.
02. Plaza Mayor
Inaugurada en 1620, con unas dimensiones de 129 metros de largo por 94 metros de ancho, esta enorme explanada de planta rectangular rodeada por soportales y edificios de ladrillo de tres plantas comenzó a construirse en el siglo XVII por orden del rey Felipe III.
Este recinto fue escenario en tiempos pasados de numerosos actos públicos, tales como corridas de toros, procesiones, fiestas, representaciones de teatro, juicios de la Inquisición e incluso ejecuciones capitales. Bajo sus porches, se encuentran comercios tradicionales, además de multitud de bares y restaurantes. Además, está cargada de placas conmemorativas, lugares históricos y otros símbolos de gran valor.
En la construcción de la plaza intervinieron varios arquitectos, entre los que destacan Juan de Herrera y Juan Gómez de Mora, que fueron los verdaderos impulsores del proyecto.
A pesar de los tres incendios sufridos a lo largo de su historia, sigue perdurando desde los tiempos en los que se encontraba fuera de la villa medieval, y se usaba como mercado, como plaza de toros o donde se celebraban actos y ejecuciones públicas.
En el siglo XV, la Plaza Mayor recibía el nombre de Plaza del Arrabal, que fue sustituido por otros nombres como: Plaza de la Constitución, Plaza Real y Plaza de la República. El nombre actual se conserva desde finales de la Guerra Civil.
En la Plaza Mayor podemos encontrar tres lugares de especial interés:
- Estatua de Felipe III: creada en 1616 por Juan de Bolonia y Pietro Tacca, fue un regalo del Duque de Florencia al rey español. Hasta mediados del siglo XIX estuvo en la Casa de Campo.
- Casa de la Panadería: es el edificio más importante y fue el primero en comenzar a construirse en 1590. Inicialmente fue la tahona más importante de Madrid. La fachada está decorada por Carlos Franco.
- Arco de Cuchilleros: este arco conforma la más conocida de las nueve puertas de acceso que tiene la Plaza Mayor. El nombre viene de la calle con la que comunica, la calle Cuchilleros.
Desde hace casi 150 años, en Navidad la Plaza Mayor se llena de puestos con artículos navideños, objetos de broma y disfraces de todo tipo. Aunque es posible ver tiendas en la Plaza Mayor durante todo el año, en esta época tan especial se decoran con más esmero y adquieren una belleza diferente.
03. Mercado de San Miguel
Anteriormente, la plaza del Mercado de San Miguel se encontraba ocupada por la iglesia de San Miguel de los Octoes. En 1790, la iglesia sufrió un devastador incendio tras el cual se rehabilitó, pero en 1809 fue demolida ya que se encontraba en un estado deplorable.
En este momento, el espacio se convirtió en una plaza pública en la que comenzó a instalarse un mercado con cajones y tenderetes. A mediados del siglo XIX, comenzó a tomarse conciencia del problema de salubridad y tráfico de la zona, por lo que se diseñó el proyecto de un mercado con estructura de hierro que se vería inaugurado en 1916.
En 1999, el mercado fue reformado conservando su aspecto original, aunque sus instalaciones no pudieron competir con los modernos supermercados y grandes zonas comerciales de Madrid, y el proyecto se vio abocado al fracaso.
Por suerte, un grupo de particulares formó una sociedad para salvarlo, tratando de mejorar su actividad tradicional para convertirlo en uno de las atracciones turísticas de Madrid y un lugar perfecto donde comer los productos típicos de la ciudad.
Además, en los distintos restaurantes que alberga el mercado trabajan chefs de la talla de Jordi Roca, Rodrigo de la Calle o Roberto Ruíz. El Mercado de San Miguel también es un lugar excelente para probar las tapas de Madrid, aunque el precio es más elevado que en otras zonas.
04. Plaza de Oriente: Conjunto Palacio Real, Teatro Real y Catedral de la Almudena
La Plaza de Oriente de Madrid es un espacio monumental que cuenta con diferentes jardines y una excelente exposición de esculturas de reyes españoles.
Diseñada en 1844 por el arquitecto Narciso Pascual y Colomer, la plaza fue construida bajo las órdenes del rey José I tras la demolición de las casas medievales que se encontraban en la zona.
Los puntos más llamativos que ver en la Plaza de Oriente de Madrid son sin ninguna duda el Palacio Real con sus jardines y el edificio de la Ópera (teatro).
En el centro de la plaza se encuentra la principal de las esculturas, una estatua ecuestre de Felipe IV realizada en bronce que fue la primera del mundo en sostenerse en pie sobre sus dos patas traseras. Para lograr esta proeza, el creador de la escultura (que la realizó a partir de dos retratos del rey pintados por Velázquez) contó con la ayuda de Galileo.
En la plaza se encuentra una colección escultórica de veinte reyes españoles realizada en piedra caliza que fue creada para la decoración del Palacio Real, pero que finalmente fueron a parar a la Plaza de Oriente.
Los jardines centrales, diseñados en 1941, se distribuyen en forma de cuadrícula formando atractivos parterres con plantaciones florales, setos y cipreses. En la parte exterior de la plaza se ubican dos frondosos jardines, los Jardines del Cabo Noval y los Jardines de Lepanto.
Hoy en día, el Palacio Real de Madrid es utilizado exclusivamente para recepciones, ceremonias y actos oficiales, ya que los reyes de España residen en el Palacio de la Zarzuela. El palacio también recibe el nombre de Palacio de Oriente.
El Palacio Real de Madrid fue construido en el siglo XVIII, por orden de Felipe V, sobre un antiguo solar del antiguo Alcázar, antes castillo musulmán. Sachetti comenzó la obra en 1738 y, tras su finalización, Carlos III estableció en él su residencia habitual en 1764.
Visitar el Palacio Real por dentro es algo imprescindible porque sus opulentos interiores son una maravilla: sus salones y habitaciones reales, así como su Armería y la Farmacia Real merecen nuestra visita.
El Palacio de Oriente está rodeado por los jardines del Campo del Moro y por los jardines Sabatini. Los primeros, al oeste, datan de la Edad Media; los segundos, se crearon en el siglo XX y están en el norte.
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| Palacio Real y jardines de Sabatini |
Uno de los datos curiosos sobre los Jardines de Sabatini es que, a pesar de su nombre, no fueron diseñados por Francesco Sabatini, sino que se instalaron sobre las caballerizas del Palacio Real que años atrás habían sido diseñadas por el arquitecto.
Los jardines, creados tras la proclamación de la Segunda República, cuentan con una superficie de más de dos hectáreas distribuidas a lo largo de tres terrazas de diseño geométrico con un carácter arquitectónico y ornamental.
Dotados de un aspecto neoclásico acorde con el Palacio Real, los jardines presentan parterres, fuentes, esculturas y un verde manto ordenado de forma simétrica que transmite calma a sus visitantes.
Muy cerca encontramos el Teatro Real. Inaugurado en el año 1850, fue durante 75 años uno de los teatros más importantes de Europa, hasta que un hundimiento provocó que permaneciera cerrado durante 41 años.
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| Vista del Teatro Real, la ópera de Madrid, desde la Plaza de Oriente |
La Ópera de Madrid cuenta con unas 1800 localidades (varían en función del escenario) y una impresionante caja escénica con plataformas articuladas que ofrece la posibilidad de combinar numerosos escenarios que hacen las delicias de los asistentes.
Dentro del conjunto monumental que se pueden visitar en la Plaza de Oriente también destaca la Catedral de la Almudena de Madrid, cuya construcción duró mas de 50 años y comenzó el 4 de abril de 1883, cuando el rey Alfonso XII puso la primera piedra.
De estilo principalmente Neoclásico, forma un bonito conjunto con el Palacio Real, si bien el exterior no es especialmente llamativo. En el interior sorprenden detalles completamente diferentes a otras catedrales: el techo y las vidrieras dejan de lado el estilo clásico para dar paso a los colores vivos y las líneas rectas.
05. Plaza de España y Templo Debod
La Plaza de España de Madrid cuenta con 36.900 metros cuadrados, algo que la convierte en una de las plazas más grandes de España. Se encuentra en un cruce de caminos: a un lado inicia la Gran Vía, una de las principales Avenidas de Madrid debido a su gran oferta de ocio. Hacia el otro lado la Calle Princesa también constituye un punto muy concurrido, con el Palacio de Lliria como principal visita.
Entre los principales elementos de interés que podemos ver en la Plaza de España destacan:
- Torre de Madrid: construida entre 1954 y 1957, la torre cuenta con 142 metros de altura que la convirtieron en el edificio más alto de Madrid en el momento. La Torre de Madrid de la Plaza de España fue durante algunos años el edificio de hormigón más alto del mundo.
- Edificio España: con un peculiar frente escalonado de ladrillos rojizos, el Edificio España preside la Plaza de España desde 1953. A lo largo de su historia ha albergado apartamentos y viviendas de lujo, además de un centro comercial. En la actualidad, tras una profunda reforma, ha reabierto sus puertas convertido en el Hotel Riu Plaza España, que esconde uno de los mejores bares panorámicos de Madrid.
- Casa Gallardo: localizada en la esquina con la calle Ferraz, la Casa Gallardo es un impresionante edificio modernista construido entre 1909 y 1914. Se trata de un edificio con una belleza única que a menudo pasa desapercibido para los viandantes que no dirigen su mirada hacia las alturas.
- Edificio de la Compañía Asturiana de Minas: construido entre 1891 y 1899 para la Compañía Asturiana de Minas, este hermoso edificio de piedra, ladrillo y pizarra coronado por tres torreones es uno de los más bellos de la zona.
- Monumento a Miguel de Cervantes: inaugurado en 1929, el monumento coronado por una bola del mundo que se encuentra en el centro de la plaza representa a Cervantes por medio de sus dos míticos personajes, Don Quijote y Sancho Panza.
Muy cerca podemos visitar el El Templo de Debod, uno de esos monumentos que no se encuentran en todas la guías de viaje y que sin duda son parte de la historia de la civilización.
Originario del antiguo Egipto y con 2.200 años de antigüedad, fue un regalo de Egipto a España por su colaboración en el salvamento de los templos de Nubia. Gracias a la ayuda internacional, Egipto consiguió salvar, entre otros, el Templo de Abu Simbel, que de otro modo hubiera quedado sepultado en la construcción de la Gran Presa de Asuán.
El Templo de Debod fue inaugurado el 20 de julio de 1972 tras dos años de reconstrucción. Fue un proceso complicado ya que, además de no tener buenos planos, en el desmantelamiento y transporte se perdieron algunas piedras.
06. Gran Vía
La Gran Vía es la calle más conocida de Madrid. Históricamente ha recibido muchos otros nombres, como Avenida de Rusia o Avenida del Quince y Medio. El más trascendente fue Avenida de José Antonio, en homenaje a José Antonio Primo de Rivera por su victoria en la Guerra Civil.
La Gran Vía ha sido una de las obras más trascendentes de España, ya que hubo que demoler más de 300 casas y afectó a casi 50 calles. Gracias a la Gran Vía se consiguió una mejor comunicación entre el centro de Madrid (Calle Alcalá) y el noroeste de la ciudad (Plaza de España).
La historia de la Gran Vía tardó en arrancar. Los primeros bocetos datan de 1862, época en que se reformó parte del centro histórico madrileño, pero el diseño final no llegó hasta 1899, cuando los arquitectos José López Salaberry y Francisco Octavio Palacios presentaron el proyecto. La construcción de la Gran Vía duró varias décadas, las obras comenzaron finalmente en 1910 y terminaron en 1929.
Gran Vía es uno de los centros neurálgicos de Madrid y en ella podremos encontrar ambiente a cualquier hora del día durante todo el año. Algunos de los edificios más famosos de esta mítica calle madrileña son el Edificio Metrópolis y el Edificio Carrión, coronado por el famoso cartel de Schweppes que preside la Plaza del Callao.
07. Plaza Cibeles
La Plaza de Cibeles es la plaza más famosa de Madrid. Está presidida por una hermosa fuente y flanqueada por imponentes y representativos edificios construidos entre finales del siglo XVIII y principios del XX.
Diseñada por el arquitecto Ventura Rodríguez en 1782, la fuente representa a la diosa Cibeles sobre un carro tirado por leones. En sus inicios, la fuente cumplió con su cometido de abastecer de agua a los madrileños. En 1895 fue trasladada hasta el centro de la plaza y pasó a convertirse en un elemento decorativo.
Entre los edificios que rodean esta plaza destacan:
- Palacio de Cibeles: el majestuoso edificio del Palacio de Cibeles, anteriormente conocido como Palacio de Comunicaciones, es uno de los más representativos de la historia de Madrid. Inaugurado en 1919, el edificio funcionó como sede central de Correos hasta que recientemente fue reformado para albergar el Ayuntamiento. En la sexta planta hay una terraza acristalada donde tomar algo con unas vistas espectaculares. Sin embargo, si lo que de verdad buscáis es una panorámica del centro de Madrid, mejor subir al Mirador de Cibeles, ubicado en la octava planta.
- Palacio de Buenavista: construido en 1777 como residencia de los duques de Alba, en la actualidad el palacio rodeado por una zona arbolada es la sede del Cuartel General del Ejército.
- Banco de España: inaugurada en 1891, la sede central del Banco de España cuenta con un imponente exterior austero, que contrasta con su hermoso interior, decorado con una excelente colección de pinturas de Goya, Mengs, Maella y Vicente López.
- Palacio de Linares: construido en 1900 bajo las órdenes del marqués de Linares, años más tarde fue restaurado para convertirse en la Casa de América, una institución que pretende fomentar las relaciones culturales entre España y los países latinoamericanos.
08. Puerta de Alcalá
La Puerta de Alcalá fue una de las cinco puertas reales de acceso a la villa y ha sido fiel testigo de la historia reciente de Madrid. Se inauguró en 1778 de la mano de Francisco Sabatini, arquitecto italiano que trabajó la mayor parte de su vida en España y dejó su sello en varios enclaves de la ciudad.
Anteriormente, existió otra Puerta de Alcalá de ladrillo, pero Carlos III ordenó su derribo y reconstrucción de estilo neoclásico. Se trata del primer arco de triunfo construido en Europa tras la caída del Imperio romano. La Puerta de Alcalá es anterior a monumentos como el Arco de Triunfo de París o la Puerta de Brandemburgo de Berlín.
El nombre de la Puerta de Alcalá, al igual que el de la calle con el mismo nombre, vienen por estar situadas en el camino que existía para ir a Alcalá de Henares.
Por su situación, en la esquina noroeste del parque del Retiro, la visita a la Puerta de Alcalá es una buena oportunidad para adentrarnos en el pulmón de Madrid, que nos garantizará un agradable paseo cerca del apacible Palacio de Cristal, asombrándonos con una de las pocas estatuas que existen en el mundo del Ángel Caído, viendo alguna interesante exposición en la Casa de Terneras o disfrutando en una barca frente al Monumento a Alfonso XII, en el que por cierto, suelen reunirse muchas personas los domingos por la tarde.
09. Parque del Retiro
El Retiro es el parque más importante de Madrid y uno de los lugares preferidos tanto por madrileños como por turistas. Se trata de un gran espacio verde de 118 hectáreas en pleno centro de Madrid.
Se construyó a mediados del siglo XVII bajo el reinado de Felipe IV, cuando se construyó el Palacio del Buen Retiro por iniciativa del Conde Duque de Olivares. En el reinado de Carlos III se agregaron el Observatorio Astronómico y la Real Fábrica de Porcelana del Buen Retiro. En época de Fernando VII se construye el embarcadero del estanque y la Casa de Fieras. Entre los espacios más destacados del parque se encuentran el gran estanque con el monumento a Alfonso XII, la Casa de Velázquez y el Palacio de Cristal, la Rosaleda, y el Parterre, que cuenta con uno de los árboles más antiguos de Madrid, el Taxodium mucronatum.
Aunque fue parcialmente destruido durante la Guerra de Independencia, recuperó todo su encanto y elegancia, convirtiéndose en un parque para el pueblo y la realeza. En 1935 fue declarado Jardín de Valor Histórico Artístico.
Puntos de Interés en El Retiro:
- Estanque: el estanque artificial es una de las primeras imágenes que veremos si entramos por la Puerta de Alcalá. En el estanque podéis alquilar barcas de remos o hacer un pequeño tour colectivo.
- Monumento a Alfonso XII: monumento impresionante situado en una de las orillas del estanque anterior, fue inaugurado en 1922. Los domingos encontraréis mucha gente cerca del monumento tocando timbales y otros instrumentos.
- Palacio de Cristal: construido en 1887 junto a su lago artificial, el Palacio de Cristal es la sede de muchas exposiciones temporales. Inicialmente se usó como invernadero.
- Paseo de la Argentina: comúnmente llamado Paseo de las Estatuas, es un paseo en el que encontraremos estatuas dedicadas a todos los monarcas de España. En un principio fueron encargadas por Fernando VI para adornar el Palacio Real.
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| Vista del Palacio de Cristal |
10. Paseo del Prado
Si la Gran Vía constituye uno de los mayores puntos de ocio de la ciudad, con tiendas, bares, restaurantes, teatros y cines, el Paseo del Prado es sin duda, el principal punto cultural de la ciudad.
Comenzando con el Museo del Prado, una de las mayores pinacotecas del mundo, se congregan también a escasos metros el Museo Thissen y el reina Sofía, en total tres de los principales museos del país. Además, en este recorrido, nos podemos parar a visitar el Jardín botánico con especies de diversos continentes en su día territorios conquistados.
Comenzamos el recorrido en el Museo del Prado. Inaugurado en el año 1819, es el museo más visitado de toda España, y se centra en los maestros europeos de los siglos XVI al XIX. Entre sus cuadros cuenta con obras maestras de pintores de la talla de Velázquez, El Greco, Rubens, El Bosco o Goya.
El museo Reina Sofía de Madrid, fundado en 1992, continúa las épocas que no cubre el Museo del Prado, comenzando a exhibir obras desde 1881, año de nacimiento de Pablo Picasso. Ofrece al visitante amplias colecciones de cuadros de pintores españoles tan importantes como Pablo Picasso, Salvador Dalí y Joan Miró. El cuadro más conocido del museo es el Guernica de Picasso, realizado en memoria del trágico bombardeo aéreo de Guernica durante la Guerra Civil.
El museo Thyssen-Bornemisza se compone de cerca de 1000 obras que el Estado español compró a la familia Thyssen-Bornemisza en julio de 1993. Situado en un emplazamiento privilegiado, el Palacio de Villahermosa, el museo tiene tres plantas. Para recorrerlo es recomendable empezar por la segunda planta para posteriormente bajar a la primera y a la planta baja. Durante este recorrido veremos la evolución histórica de la pintura, con obras que abarcan los siglos XVII-XX. Entre los artistas internacionales más relevantes, destacan obras de Van Eyck, Van Gogh, Caravaggio y Edvard Munch, entre otros.
Fundado junto al Manzanares en 1755 bajo el encargo de Fernando VI, el Real Jardín Botánico fue trasladado posteriormente a su actual emplazamiento junto al antiguo Museo de Ciencias Naturales, donde años más tarde se instalaría el Museo del Prado.
Las expediciones científicas a lo largo de Europa acumularon numerosas especies vegetales diferentes, algo que, unido a los intercambios de plantas que se realizaban con otros jardines botánicos, lo convirtió en uno de los jardines botánicos más importantes de Europa a comienzos del siglo XIX.
Durante la Guerra de la Independencia el jardín sufrió años de abandono, hasta que en 1857 se llevaron a cabo importantes reformas que incluyeron la instalación de un zoológico que más tarde sería trasladado al Retiro para convertirse en la Casa de Fieras. En este momento el jardín volvió a sumirse en décadas de abandono tras las cuales sería declarado Jardín Artístico y Monumento Nacional. En 1974 comenzaron las obras de restauración que le devolverían su aspecto original.
Actualmente el Real Jardín Botánico de Madrid cuenta con más de 5.000 especies de plantas y árboles diferentes, y ofrece numerosas exposiciones y actividades en sus instalaciones.
El jardín cuenta con cuatro terrazas escalonadas a lo largo de las cuales se distribuyen las diferentes especies. En la zona superior, ubicada tras el pabellón en el que se realizan exposiciones temporales, se encuentran algunas colecciones especiales como los bonsáis donados por Felipe González. La segunda terraza, de estilo romántico, cuenta con un estanque y dos invernaderos, mientras que en la siguiente terraza se encuentra una colección vegetal que muestra un recorrido desde las plantas más primitivas hasta las más evolucionadas. En el nivel más bajo y más amplio del jardín se encuentran las plantas más vistosas y ornamentales, además de las plantas medicinales, aromáticas y frutales.
Como último elemento a destacar en nuestro recorrido por el Paseo del Prado, cabe destacar la vista de la Plaza Neptuno, todo un símbolo del centro de la capital, rodeada por magníficos edificios construidos entre los siglos XVIII y XIX. En el centro encontramos una fuente de grandes dimensiones inspirada en la mitología grecorromana con una enorme escultura de Neptuno, dios de los mares, que empuña un tridente mientras cabalga sobre un carro tirado por dos caballos con cola de pez, y construida con el objetivo de situar a Madrid a la altura de grandes ciudades como París o San Petersburgo.
11. Museo Arqueológico Nacional
Fue fundado por Isabel II en el año 1867 con el objetivo de preservar el pasado de España, desde la Prehistoria hasta la Edad Moderna. Su inauguración supuso la concentración del legado cultural existente en el país, antes dividido entre multitud de organizaciones.
Entre los años 2008 y 2014, el museo sufrió una completa reforma que ha hecho que su importancia haya aumentado de forma muy significativa. Los 65 millones de euros que se destinaron han hecho que el número de visitantes casi se haya triplicado desde su anterior estado.
La colección del Museo Arqueológico de Madrid se compone en su mayoría de objetos encontrados en la Península Ibérica a lo largo de la historia. Además de estos, también hay importantes colecciones de Egipto, Oriente Próximo, Grecia y Roma.
Algunos de los objetos más importantes expuestos en el museo son la Dama de Elche, el Monumento de Pozo Moro, la Estatua de Livia, la Dama de Baza, las seis coronas del increíble Tesoro de Guarrazar, la Estela de Nebsumenu y la Estatua de Harsomtus-Em-Hat.
12. Museo de Cera
El Museo de Cera de Madrid es uno de los más curiosos de la capital. La ubicación del Museo de Cera a muy pocos metros de la Plaza de Colón y del Museo Arqueológico Nacional, hace que sea una visita cercana al centro y, por ello, bastante recomendable.
Entre las figuras de cera que se pueden ver en el museo se encuentran estrellas de la gran pantalla como Leonardo di Caprio, Antonio Banderas y Brad Pitt; personajes de películas de terror como Freddy Krueger, Frankenstein o Drácula; o bien personajes históricos entre los que se puede ver a Napoleón, Cleopatra o Carlos V.
Entre las figuras más polémicas del Museo de Cera de Madrid podríamos incluir una figura de Manolo Escobar realizada en 1973 que no gustó a la dirección ni al propio Manolo, por lo que tomaron una peculiar decisión: la llevaron a la Casa de Campo para dinamitarla. Después se realizó otra figura que es la que se puede ver en la actualidad en el museo.
El museo cuenta con algunas atracciones adicionales como el Tren del Terror, que ofrece a los visitantes un peculiar paseo en el que podrán disfrutar de una curiosa mezcla de figuras animadas que incluyen ratas, dinosaurios, tiburones, Aliens o personajes de la Guerra de las Galaxias.
El museo también incluye el viaje virtual que se realiza a bordo de un simulador, además de un paseo por la historia de España a través de una película en 3D.
13. Casa de Campo
La Casa de Campo tiene una extensión tan amplia que supera cinco veces en tamaño al mítico Central Park de Nueva York, y en casi siete al parque más querido de Londres, Hyde Park.
El corazón de la Casa de Campo acoge diferentes instalaciones como el Parque de Atracciones, el Zoológico, una parte del recinto ferial de IFEMA, el pabellón multiusos Madrid Arena, el Teleférico o el Club de Campo.
Una de las zonas más concurridas son los alrededores del lago, que resultan especialmente agradables para disfrutar de la naturaleza paseando, tomando algo en alguno de los bares, o bien alquilando una barca.
Inaugurado en 1969, la apertura del Teleférico de Madrid se vio envuelta por una gran expectación y su puesta en marcha tuvo que ser aplazada varios meses desde la fecha prevista debido a las quejas de los vecinos, que creían que la intimidad de sus hogares se veía comprometida con el paso de las cabinas cerca de sus ventanas.
14. Parques de atracciones de Madrid
Si hay un motivo por el cual visitar Madrid, es sin duda recorrer alguno de sus parques de atracciones y temáticos. Desde los más emblemáticos Zoológico y Parque de atracciones Madrid situados en la Casa de Campo, hasta los modernos Faunia o Parque Warner, más alejados de la ciudad, encontramos diferentes opciones con las cuales disfrutar con los los más pequeños.
El Parque de atracciones Madrid fue inaugurado en 1969. Siempre ha tenido atracciones novedosas y actualmente se encuentra en pleno rendimiento con más de un millón de visitantes anuales. Ha sido remodelado y ampliado cada pocos años, mejorando mucho sus atracciones y su aspecto general. Tiene varias atracciones espectaculares que gustarán a los pequeños y no tan pequeños como el Abismo, Tarántula, Tornado y Tifón.
Inaugurado en 1972 en el verde enclave de la Casa de Campo, muy próximo al Parque de Atracciones, el Zoológico de Madrid ha sido reformado y ampliado en diferentes ocasiones para tratar de mantenerse en el candelero. El Zoo Aquarium de Madrid es hogar de especies de animales tan variopintas como el bisonte americano, el panda gigante, el tiburón toro o el pigargo vocinglero, cuyo grito resuena en todo el recinto. Ofrece a sus visitantes diferentes actividades diarias con delfines, leones marinos, aves rapaces o papagayos.
Otro de los parques mayormente reconocidos de Madrid es Faunia, donde conviven más de 700 especies animales y más de 1.000 especies vegetales diferentes. Dividido en 15 ecosistemas bien diferenciados, lo más llamativo del parque es que permite interactuar con animales, como osos marinos, manatíes, pelícanos y pingüinos. Los más valientes también podrán dar de comer a los cocodrilos de Faunia.
Finalmente, dentro del recorrido por los parques temáticos destacamos Safari Madrid, una aventura africana en el centro de la Península Ibérica. Tras adentrarnos en el recinto nos encontraremos con una estampa de lo más sorprendente y gratificante. Cebras, camellos, avestruces, cabras, caballos, antílopes e infinidad de animales comienzan a rodear los vehículos en medio de un inocente juego para buscar el más preciado de los tesoros: las zanahorias que les entregan los visitantes.
Además de los animales que es posible tener literalmente “al alcance de la mano”, asomados a la ventanilla del coche, hay numerosos animales sorprendentes que se pueden ver de cerca, como jirafas, osos, monos, elefantes, leones, hipopótamos, o rinocerontes blancos de más de 4.000 kilos.
Safari Madrid cuenta con diferentes animales procedentes del tráfico ilegal que fueron entregados al centro tras ser incautados por las autoridades, entre los que se encuentran algunos tigres, puercoespines o algunas aves rapaces.
